2/12/15

Crónica nuevas Caras de Belmez

José M. Garcia Bautista (Octubre 2004)

Acabábamos de llegar a Bélmez de la Moraleda, pasaba el mediodía y la vida en el pueblo parecía transcurrir con normalidad, en su coqueta plaza vehículos entraban y salían y aguardábamos la llegada de Luis Mariano Fernández que nos llevaría allá donde hoy habita el misterio.

Tras una breve espera Luis Mariano, Lorenzo Fernández Bueno (Revista “Enigmas”) y Mª.Luz Fernández nos recogían y mientras charlábamos nos conducían a la C/Cervantes nº7, la calle que vio nacer a María Gómez Cámara y donde hoy unas inquietantes caras son el mudo testigo de un mensaje indescifrable que parece haber dejado María a sus buenos amigos y familiares. Subiendo la Cuesta de las Caras no pudimos menos que volvernos hacía la derecha y fijar nuestra mirada en la C/Real nº5...era la Casa de las Caras, la casa donde en 1971, un crudo Agosto, apareció por primera vez un frío rostro que ya nunca sería olvidado por María, era su casa, era la célebre casa de las Caras de Bélmez.

Subimos la pequeña cuesta y al llamar al número 7 la grata y baja voz así como una cálida mirada de Pedro Amorós nos franqueaba el paso, era un honor estar acompañados por el presidente de la S.E.I.P (Sociedad Española de Investigaciones Parapsicológicas), Pedro J. Fernández, David Sentinella, Luis Mariano, Lorenzo Fernández y otros amigos que se encontraban en pleno proceso de investigación y que nos servirían de guías de lujo en esta visita. Fue el propio Pedro Amorós quién con una amabilidad exquisita hacía nosotros quiso mostrarnos la casa, comenzando desde el bajo donde tenía dos lozas extraídas donde parecía verse en la primera un difuso caballo y en la segunda el perfil de un rostro humano que con mediana claridad despuntaba sus formas en el cemento. Pedro nos explicó su proceso de formación y como evolucionaron, tras ello nos condujo a una pequeña habitación de apenas cuatro metros cuadrados donde nos mostró un firme de cemento recién cuajado y con las expectativas puestas en la posible aparición de caras cuyas formación en algunos casos pudimos comprobar hacía la tarde que presentaba síntomas evidentes, algo si nos llamó la atención: la extrema humedad del habitáculo (91% de humedad relativa) según los testigos electrónicos ubicados por la S.E.I.P. en dicha habitación.

Pedro nos hizo subir las escaleras mientras nos explicaba que la cama de la primera planta era la habitación de María y uno comprendía como aquella tosca casa guardaba tantos sentimientos, emociones y secretos para María como aquella donde vivió, seguimos subiendo y al llegar a la cuarta planta Pedro nos comenzó a explicar todas y cada una de las caras que había en aquel recinto tan castigado por los miles de belmoreños y curiosos que atraídos por las nuevas caras habían acudido al lugar. Nada más comenzar y casi en a nuestros pies estaba la primera de ellas, un poco más hacía delante la cara que hipotéticamente guarda parecido con María y que mostraba una clara evolución desde las primeras instantáneas hasta el día de nuestra llegada, en el primer rincón tres rostros más, una cara, un perfil y una recién descubierta ,por Pedro Fernández, cara de un militar (?), a un escaso metro una nueva cara y poco más hacía delante el rostro difuso y casi ya marchito de lo que fue otra cara, en el segundo rincón –junto a las ventas- una nueva sorpresa: un rostro de perfil con un tocado, una cara asustada casi al rincón y los restos de una imagen que representaba a una madre con un niño...sencillamente impresionante. Seguimos el recorrido junto a nuestro guía de excepción que nos mostraba un clarísimo rostro en el suelo y a pocos pasos un perfil, al rincón un nuevo rostro casi calavérico ...más tarde un nuevo perfil y una nueva imagen en formación casi en el centro de la muy torturada y pisada sala. Las caras están ahí, son visibles y están definidas, no son un fraude, son reales y se desconoce las razones de su aparición en esta su casa aunque se intuyen. Pedro Amorós nos comentaba como se formaban, su definición en la ultima capa del cemento, casi la exterior antes de una película protectora que en el caso de esta estancia no existe y de ahí su degradado. Nos comentó la hipótesis del agua y comprobamos por nosotros mismos como no es factible, su hipótesis de trabajo así como las líneas de actuación próximas: tenerlo todo perfectamente fotografiado y filmado, volver a echar un suelo de cemento respectando aquellas caras que no están deterioradas y esperar que el fenómeno se vuelva a reproducir... Una clave si nos parecían apuntar: todo parece hallarse en la humedad.

Pedro Fernández recogía con paciencia todo resto de polvo de cemento para unas nuevas pruebas científicas, David Sentinella fotografiaba pacientemente cada palmo de suelo, Luis Mariano era una centralita telefónica y casi no daba más de si tratando de explicarnos procesos de formación y experiencias de tipo paranormal vividas en aquella casa de la calle Cervantes 7... ruidos extraños, grabación de diferentes psicofonías, sentirse extrañamente acompañado o ser testigos del aporte de una moneda ante si... algo está pasando en Bélmez, algo está pasando y ha desencadenado toda una hilada de experiencias y acontecimientos paranormales que hoy como en 1971 han pasado ya a ser parte de la historia e Historia paranormal más importante de nuestro país y como antaño de nuestro planeta.

Salimos casi a las 16:00 de esta casa ,un breve descanso para almorzar en compañía de estos buenos amigos o de otros llegados ex profeso a Bélmez para ver e informar, como el caso de Raúl Ruiz Berdejo compañero de Onda Jerez. Almorzando en “Casa Blanca” a la salida del pueblo se hacía hipótesis sobre este nuevo fenómeno y una preocupación surcaba nuestra mente... Tras compartir mesa y mantel ,descanso y animada charla volvimos a Bélmez de la Moraleda...esta vez una increíble cola aguardaba tras subir la Cuesta de las Caras para entrar en la casa de la calle Real número 5,...nos quedamos impresionados, hoy como hace ya más de 30 años la gente se echaba a la calle a compartir, vivir y ser parte del misterio y acudía casi en peregrinación a la casa de las Caras. Lorenzo Fernández y Luis Mariano que se encontraban junto a nosotros nos comentaban lacónicamente e igual de impresionados: “esto es increíble... parece que estamos viviendo nuevamente todo lo sucedido en el 71... parece que hemos vuelto atrás” y la verdad es que la cola de aquellas personas ante la casa de María, sus comentarios, la expectación y el interés, los rostros de curiosidad y la mirada puesta en estos investigadores hacían sentirnos a todo que aquello estaba muy vivo y que era ,ante todo, un fenómeno real.

En el número 7 de la calle Cervantes se vivía agitación y nervios, muchas personas las que se acercaban al lugar y muchos curiosos arremolinados ante la puerta. Felipa Gómez nos comentaba que las puertas de su casa estaban abiertas a los investigadores de buena fe que acudían a investigar y a contar lo que estaba pasando,a ayudar a su familia a desvelar la verdad, a informar de que lo que allí sucedía era extraordinario y que por su parte no se cobraba ni un solo euro... su casa era ahora una casa del pueblo abierta a todo aquel que se quisiera acercar a vivir el fenómeno.

Ante nuestra cámara para cubrir un reportaje para Localia Tv Sevilla desfilaron todos los implicados en este apasionante caso, desde investigadores, redactores, periodistas, trabajadores en la casa, familiares a simples ciudadanos interesados en el fenómeno y un mismo sentimiento: lo que estaba sucediendo era inexplicable.

Nuestra impresión particular es que las caras nuevas están en el suelo y aunque la humedad tiene mucho que ver en todo el proceso de formación se aleja mucho de ser un fraude, todo lo contrario, las caras parecen degenerar y metamorfosear, algunas perfectamente definidas , otras permanecen inalterables y las más desafortunadas han desaparecido debido al trasiego incontrolable de curiosos llegados al lugar. Nos dio la impresión de que este fenómeno y todo el boom informativo se ha escapado de las manos y del control de los investigadores que evidentemente poco pueden hacer en un lugar que no les pertenece y donde únicamente desarrollan su labor. Comprobamos como hay un control científico sobre todas las caras y un seguimiento muy especial a sus evoluciones como a la localización de nuevos rostros y formaciones. A la preocupación por que pudieran desaparecer y al sentimiento mutuo y compartido por estos dos investigadores que tanta visita a la casa de Felipa, la casa que vio nacer a María, han destrozado el firme de cemento que usan estas Caras para manifestarse. Esa era nuestra preocupación...ver como el suelo se deterioraba paulatina y rápidamente ante las pisadas de miles de personas sin haber encontrado respuestas, como la humedad de la habitación estaba alterada por el trasiego de vecinos y curiosos que se acercaban al lugar y como algunas caras y gran parte del suelo ya no era más que arena que Pedro Fernández trataba de preservar para su estudio. Ese puede ser el mal endémico de estas nuevas caras: la curiosidad popular. La solución: un nuevo suelo de cemento y paciente espera...el riesgo: que no vuelvan a surgir y hayan sido un anónimo canto del cisne teleplástico...El tiempo será juez inexorable que juzgará este nuevo fenómeno y análogo en Bélmez de la Moraleda.